CUIDADO DE LAS JOYAS

Cada pieza de Galatea se crea con materiales de la más alta calidad y se baña en oro de 18 quilates para garantizar su durabilidad a largo plazo. Aunque esta calidad asegura una larga vida útil, un cuidado adecuado es fundamental para mantener su brillo y esencia durante muchos años.

Como regla fundamental:

  1. Separa las joyas según el metal: Esto previene que los metales se empañen al interactuar entre sí.
  2. Limpia tus joyas antes de almacenarlas: Guardar joyas sucias durante mucho tiempo puede provocar deslustre.
  3. Encuentra un lugar seco y oscuro para guardarlas: La humedad es perjudicial para las joyas.
  4. Asegúrate de que las piezas no se toquen entre sí para evitar ralladuras.

Algunas precauciones que debes tener en cuenta incluyen evitar el contacto directo con agua salada, productos químicos, perfumes, desodorantes o geles. No se deben usar las joyas al ir a la piscina o la playa, ya que la sal y el cloro pueden causar manchas y daños. En caso de que las joyas entren en contacto con agua salada, se aconseja enjuagarlas con agua dulce y jabón neutro. Además, evita el impacto de las joyas sobre superficies duras y la exposición prolongada al sol.